Se acaba el curso 2019-2020, y para los alumnos de 2º de Bachillerato concluye su paso por el colegio. Setenta y dos alumnos y alumnas. Un gran grupo en todos los sentidos, que han llenado sus aulas, patios y capilla con alegría y vitalidad, algunos durante 14 años porque comenzaron desde niños. Sus logros no han sido pocos. Con nosotros han ido creciendo personal y académicamente. Se van como buenas personas y como buenos estudiantes pues han promocionado sesenta y tres alumnos con una media de 7,19 p. Y dieciséis de estos (un 25,4 %) con un rendimiento destacado, obteniendo como mínimo una nota de 8.50 cada uno de ellos. ¡Enhorabuena!
Pero más allá de los logros académicos, las especiales circunstancias de este curso han propiciado en nuestra comunidad oportunidades para crecer en el ámbito personal, fortalecer nuestras "raíces" e ilusionar nuestras "alas" por el futuro y el mañana con una mirada distinta en la sociedad. Sentimos profundamente no haber podido darles las despedida que merecen. A ellos y a sus familias a quienes estamos desde el colegio también profundamente agradecidos.
En este año insólito de despedidas silenciosas, queremos agradecer la confianza que siempre habéis depositado en el Colegio Diocesano publicando vuestra orla de graduación.
Os deseamos la bendición de Dios y una feliz andadura de futuro. ¡Gracias!